Me sorprende (que me sorprenda) que, al margen de esta cultura del acoholismo que hemos aceptado como sociedad, y de la que formo parte, haya un gran vacío legal y moral en las fiests de los pueblos.
Que se normalice el consumo de alcohol entre menores, con la actitud chulesca y violenta que añade. Que se normalice la hipersexuslización de LAS adolescentes a, cada vez más temprana edad. Claro que piensas en los productos culturales que consumen y te das cuenta que sólo puede generar eso. Esa jerarquía. Ese imponer, der superior al resto, intimidar, se aceptsdo por los superiores, ser el o la malote.
La orquesta son hombres guapetes cantando vestidos con mucha ropa y hombres feos tocando instrumentos. Bailarinas despampanantes con poquísima ropa bailan y hacen los coros con modelitos con el culo y el escote sl aire que se van cambiando en lo que parece una competición por ver con cuál son más suegerentes para el público baboso.
Me niego a pensar que el hecho de que la letra de una cancion en atracciòn de niños llame a una mujer perra y diga que su toto está roto y que la tararee y la baile una niña de 4 años, me niego a pensar que eso, esté bien.
Soy incapaz de ignorar cuando algo no está bien. No puedo pasar de ello y relajarme, no puedo. Me he perdido una adolescencia normal por esto y voy camino de perderme una juventud normal por la misma rszón. Me gustaría poder fluir, pero soy incapaz. No sé como enfrentarme a esto en un futuro, con mis propios hijos, si los tengo. Las películas siempre son muy bonitas, con una sfiestas de pueblo intergeneracionales en las wue todos están de buen rollo. No es para nada así. Ojalá lo fuera, así estaría bien